Hoy tengo ganas de reirme hasta que me duela la panza
Hoy tengo ganas de caminar a ninguna parte
Hoy tengo ganas de gritar saltar y cantar
Tengo ganas de que no se me vayan las ganas
Voy caminando por las calles con el pelo suelto,
sonriente,
simulando tener todo resuelto.